Warcraft: Orcs & Humans (o Warcraft I) es un videojuego creado por Blizzard Entertainment en 1994 que inauguró la saga Warcraft convirtiéndse en un éxito de ventas entre la categoría de estrategia en tiempo real. En él se enfrentan dos razas, los humanos del reino de Azeroth y los orcos de la Horda que han invadido su mundo.
El juego fue lanzado íntegramente en inglés.
En la Era del Caos, dos facciones lucharon por la supremacía. El Reino de Azeroth fue muy próspero, los humanos que lo habitaban lo convirtieron en un paraíso. Los caballeros de Stormwind y los Clérigos de la Abadía de Northshire se movían a lo ancho y largo del reino sirviendo al pueblo de su Rey con honor y justicia. Los ejércitos bien entrenados del Rey mantuvieron una apacible paz que duró muchas generaciones. Entonces llegaron las hordas de los orcos... Nadie sabía de donde llegaron esas criaturas, ni se estaba preparado para el terror que podían desatar. Sus guerreros portaban hachas y lanzas que usaban con una mortal habilidad mientras que otros cabalgaban sobre sombríos lobos tan negros como una noche sin luna. Inimaginables fueron los destructivos poderes de su magia demoníaca, provinientes de los fuegos del inframundo. Con un ingente arsenal de armas y hechizos, los dos ejércitos colisionaron en una contienda de malicia, inteligencia y fuerza bruta, cuyo vencedor dominaría la totalidad de Azeroth. Bienvenidos al mundo de Warcraft.
Características
Warcraft no solo se convirtió en un clásico que consiguió numerosos premios sino que sentó las bases para los futuros juegos multijugador. Los jugadores del mítico reino de Azeroth tenían que mantener sus posiciones a través de los recursos naturales con los que podían construir máquinas de guerra con los que destruir al enemigo.
Al poder jugar con ambas facciones, había dos líneas históricas distintas que englobaban 12 escenarios por cada uno de los bandos con su propio argumento. Desde espadas hasta magia, todos los elementos de la fantasía clásica podían ser explorados: densos bosques, oscuras mazmorras, pantanos burbujeantes y ejércitos listos para la conquista.
El jugador controlaba numerosos ejércitos y criaturas de distintas clases que incluían Knights, Archers, Clerics, Warlocks, Daemons, Elementals, y The Dead.
La opción de multijugador le daba a Warcraft un nuevo nivel de interés. Los jugadores podían retarse y luchar en 20 mapas a la medida para discernir quien era el señor de la guerra supremo. El juego soportaba conexiones vía modem y redes IPX, trabajando bajo una platadorma que daba soporte tanto a IBM-PC como a Macintosh.
Historia
Véase: Primera Guerra
El reino de Azeroth
Antes de comenzar el juego, los orcos originarios del planeta Draenor, fueron corrompidos por la Legión Ardiente para formar la Horda orca de Draenor. Los orcos acabaron con las demás razas de su planeta quedándose con ganas de más. Su líder, Gul'dan se unió al último guardian de Tirisfal, Medivh, corrompido por Sargeras, para que abriera el portal hacia el mundo de Azeroth.
En este punto, la campaña orca muestra a la Horda atacando a la Alianza. Tras varios enfrentamientos, los orcos derrotan al reino de Azeroth y obligan a desplazarse a los supervivientes hacia el norte. La ciudad de Stormwind es destruida al final de la campaña.
La campaña de los humanos es el contrapunto a esta historia. Los caballeros de Azeroth consiguen defenderse de la invasión y obligan a retroceder a los orcos de vuelta a su fortaleza, Blackrock Spire a la que asaltan y destruyen.
Juegos posteriores mostraron que el verdadero resultado de la Primera Guerra fue el que dio la victoria a los orcos aunque se le agregaron ciertos detalles de la campaña de los humanos. Muchos detalles de la historia fueron incluidos en novelas, historias cortas o videojuegos.
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