GENERO: Acción, Aventura, Shooter
ONLINE: No
AÑO: 2012
JUGADOR:
1-8
SECUELA:
Si
DESARROLLADORA: Capcom
PLATAFORMA: PC/Xbox 360/ PS3
ANALISIS:
Como hemos dicho
Resident Evil 6 es un juego rico en contenidos, y divide su vasta oferta en
varias campañas que están disponibles desde el principio. Son tres las
liberadas de inicio, aunque como ya hemos dicho hay una serie de extras que se
desbloquean al terminar y que son tan interesantes que tendrán su propia
sección más adelante en el análisis.
Así pues nada
más poner en marcha el título se abre ante nosotros la primera de las
elecciones que deberemos llevar a cabo. Leon Kennedy y Helena Harper forman
tándem en la primera de las campañas, Chris Redfield y Piers Nivans hacen lo
propio en la segunda y, por último, Jake Muller y Sherry Birkin encabezan la
tercera. La cuarta campaña, que describiremos al final y que se desbloquea al
terminar el resto, será la protagonizada por Ada Wong, y que supuso una de las
grandes sorpresas de Capcom durante la fase de promoción del producto.
Las tres
campañas que componen el título de inicio tienen la particularidad de que se
pueden disfrutar en el orden que deseemos, e incluso alternar las partes entre
sí, ya que cada una está dividida en cinco capítulos que podemos disfrutar de
forma independiente. Esto resulta de cierta utilidad debido a que los
acontecimientos transcurren en orden cronológico. ¿Qué significa esto? Nos
explicamos. Si queremos conocer las tres historias de los seis protagonistas
por separado bastará con superar las tres campañas de forma independiente, una
detrás de otra; no obstante si queremos ver cómo todo se entrelaza y descubrir
qué van haciendo los héroes en los mismos lapsos de tiempo, también podemos
completar inicialmente todos los capítulos número uno de las tres campañas,
después lo capítulos número dos y así sucesivamente.
Resident Evil 6
es uno de los títulos más generosos en cuanto a contenidos que hemos visto en
los últimos tiempos. Varias campañas, cooperativo, modos adicionales...
Además, y
también en cuanto a opciones de disfrute, no sólo podemos personalizar el nivel
de dificultad entre los cuatro disponibles de inicio, sino que además podemos
escoger si disfrutar del título ya sea acompañados o en solitario. La parte
protagonizada por Ada Wong es la única que no permite cooperativo, pero el
resto ofrecen la posibilidad de que un amigo encarne al otro personaje ya sea
en multijugador local con pantalla dividida o a través de internet. Además cada
una de las partes del título puede superarse también con uno u otro personaje,
aunque las diferencias entre cada pareja no va mucho más allá de lo cosmético.
Todas las
campañas tienen sus puntos comunes. Las tres guardan una estructura
relativamente similar, todas ellas tienen también jefes a menudo gigantescos y
temibles, y también hacen transcurrir su jugabilidad a menudo por zonas muy
estrechas y con una linealidad llamativa incluso para el género shooter al que
pertenece Resident Evil 6.
Oscuridad -Leon
y Helena-
La primera
campaña y, de hecho, quizá la más interesante para abrir el juego, es la
protagonizada por Leon Kennedy. En realidad incluso para acceder al primer menú
del juego hace falta superar un breve prólogo de algo más de media hora,
protagonizado por el rubio protagonista y en el que escoltaremos a una herida
Helena Harper para hacernos con los controles del título y con los esquemas de
control que propone. Todo este capítulo de apertura sonará a inconexo en un
principio, pero poco a poco irá tomando forma con los eventos que viviremos en
la campaña.
La posibilidad
de escoger el personaje con el que protagonizar la campaña aporta un plus de
variedad al título.
Ésta es, de
hecho, la que más cantidad de material cinemático alterna con las secciones
jugables, y si bien la historia es bastante convencional, lo cierto es que se
sigue con bastante interés. En este sentido la apuesta de Capcom por la
narrativa ha sido importante en este primer tercio del programa, así que era
fundamental que despertara atractivo y seducción en el aficionado, ya que de no
haberlo logrado la fuerte carga de secuencias de vídeo que hay a lo largo de
ella podría haber cuajado algo muy tedioso.
Los cinco
capítulos de la campaña que abre el fuego nos van llevando por escenarios muy
distintos entre sí. La variedad es una de las normas del juego en cuanto a los
decorados, y cada una de las secciones está ambientada en un telón de fondo muy
distinto: oscura línea de metro, un lúgubre cementerio, una siniestra
mansión... Este tipo de lugares, tan recurrentes en la marca de Capcom, hacen
pensar en que es la parte que más reminiscencias guarda con los orígenes de la
saga, y no nos equivocaremos si pensamos así. No diremos que la experiencia
jugable es la de un Survival Horror como los episodios iniciales de la IP, pero
sí es el segmento del programa que más se asemeja a ello.
A pesar de la
condición lineal de la que hace gala el juego completo, casi un shooter sobre
raíles dadas las zonas tan estrechas que a menudo tenemos que transitar con
nuestros personajes, la protagonizada por Leon y Helena es la parte del juego
que más se presta a la exploración y la que tiene más tramos de
"tranquilidad antes de la tormenta". Como siempre hacemos en nuestros
textos pasaremos por alto cualquier tipo de spoiler que pudiera estropear la
experiencia a los aficionados, pero sólo diremos que hay algunas sorpresas en
el argumento y algunos eventos que nos resultarán familiares.
Los enemigos son
variados a pesar de que las situaciones no lo son tanto, y muchos de ellos
ofrecen retos muy distintos entre sí. Los rivales, eso sí, son
predominantemente orientados al combate cuerpo a cuerpo en esta parte, lo que
crea unas situaciones relativamente razonables de lidiar cuando se acercan en
pequeños números y tenemos munición. La filosofía de la primera historia es la
de que las balas no abunden y que las plantas curativas tampoco rebosen, y es
que si bien en ninguna de las partes del juego nos van a sobrar, lo cierto es
que en las historias de Chris o Jake, más volcadas en la acción, sí sentiremos
que vamos algo más holgados en este sentido.
El protagonizado
por Leon, además, es el segmento del juego con un tempo más calmado. La
intensidad absoluta de Chris y el énfasis por el cuerpo a cuerpo de Jake son
las señas de las otras fracciones del programa, pero el estilo "casa
encantada" de la primera posee un encanto añejo realmente irreprochable.
Es, quizá también, la parte más encorsetada del producto, con algunos interminables
pasillos oscuros y tenebrosos regalándonos algunos momentos de auténtica
tensión. El miedo, como siempre, vuelve a estar desterrado de la fórmula, pero
hay uno o dos sustos estimables gracias al componente más lúgubre de esta parte
del juego en contraposición al resto de las campañas, mucho más luminosas. Por
si fuera poco hay varios jefes, pero el final es verdaderamente épico, quizá no
tanto en términos de diseño como por ser acreedor de una dificultad endiablada:
por fin a la altura de los desafíos a los que en el pasado Capcom nos tenía
acostumbrados.
Muchos QuickTime
Events, más disparos e infinidad de zombies. Resident Evil 6 nos va a poner a
prueba.
Invasión -Chris
y Piers-
Si la primera
campaña de Resident Evil 6 es la que más se parece a lo que los hardcore de la
saga demandaban, la segunda se asemeja más a lo que los últimos años de la
franquicia han estado ofreciendo a los aficionados. El componente shooter más
puro es el de ésta, con una experiencia jugable que a más de uno recordará a
una suerte de Gears of War con zombis.
La narrativa
pasa aquí a un segundo plano. Lo que se nos cuenta en la historia de Chris y
Piers, que recorren algunos lugares del mundo haciendo frente a otra cara de la
infección, tiene que ver mucho más con la acción que con el desarrollo de un
guión. También hay secuencias cinemáticas, pero la experiencia se centra mucho
más en ser intensa desde el punto de vista de los tiroteos que de cualquier
otra consideración que tenga que ver con el desarrollo de los personajes o los
acontecimientos. ¿Es por ello mejor o peor que la primera? Dependerá del gusto
del aficionado, pero definitivamente lo que es sobre todas las cosas es una
oferta jugable muy distinta.
Quizá resulta
algo menos inspirada y sorprendente que la de Leon por su ruptura total en
cuanto a prisma, pero como shooter en tercera persona con coberturas, la
epopeya de Chris Redfield y compañía ofrece algunas secuencias de acción
impactantes y muchos momentos potentes. Aquí los enemigos están eminentemente
pertrechados hasta los dientes, con un arsenal que incluye armas de fuego, y es
que en esta campaña la amenaza a menudo adopta formas más sutilmente humanas.
Todo esto hace que se parezca más a una guerra total contemporánea, con algunas
secuencias en las que estaremos rodeados de soldados aliados y enemigos,
vehículos blindados y balas volando alrededor de nuestra cabeza tratando de
tomar una ciudad o de avanzar a través de alguna posición medianamente
fortificada.
La campaña de
Leon Kennedy será la más estimulante para los aficionados a los originales de
la saga.
Este tipo de
escenas de batalla suceden únicamente en momentos puntuales, y el resto del
tiempo lo pasamos en estancias más o menos reducidas y con la clásica oscuridad
y componente nocturno de la serie. Sin embargo ya el hecho de que esta campaña
se abra con una escena de invasión sobre una aldea a plena luz del día y con
algunas reminiscencias con shooters bélicos muy conocidos, hace que al
aficionado le quede muy claro ya desde el comienzo que Leon Kennedy y Chris
Redfield ofrecen cosas muy diferentes entre sí en términos jugables.
Si por algo
destaca esta parte del juego es por su ritmo trepidante y su salvaje
intensidad. Quizá precisamente por su prisma sea esta porción la más
disfrutable acompañados, ya que es donde la ambientación, el guión y el
ambiente opresivo del que suele hacer gala la franquicia menos hacen acto de
presencia.
Contacto -Jake y
Sherry-
De acuerdo.
Hasta aquí tenemos claro que la campaña de Leon Kennedy es la más cercana al
origen de la saga, que la de Chris Redfield es una descarga de adrenalina
repleta de acción y cargada de intensidad, pero... ¿y la de Jake Muller? El
hijo de Albert Wesker y su acompañante femenina tienen también su propia
identidad jugable, con un tercio final de Resident Evil 6 que no se parece en
nada al resto.
¿Estás
preparado? Las criaturas monstruosas de Resident Evil 6 son realmente
difíciles. Podrás ajustar la dificultad, pero el reto siempre será alto.
El principal
motivo de esto tiene que ver con la propia idiosincrasia de Jake en cuanto a su
estilo de combate, lo que hace que el viaje de ambos que se inicia en una
ficticia república de los Balcanes y que concluye en China como el resto de las
historias sea mucho más directa. Aquí la historia que pierde algo de
importancia en el segundo segmento vuelve a ganar relevancia, y sirve como
elemento de propulsión de unos escenarios que vuelven a ser bastante variados.
En términos
jugables podemos hablar claramente de la peor parte del juego. La experiencia
encarrilada vuelve a ser la característica clave, pero lo volcadas que están
determinadas partes de la campaña en el combate cuerpo a cuerpo como, por
ejemplo, la huída del centro de reclusión hacen de su disfrute algo más limitado
que en el resto del programa. No es esta campaña sea mala, ni mucho menos, pero
con sólo unos minutos a los mandos de Jake o Sherry nos damos cuenta de que
falta algo de la inspiración del resto de partes tanto en cuanto a las
situaciones que afrontamos como en los propios escenarios.
Se habló mucho
ya de la importancia que tendría el rango cercano en la personificación de
Jake; y lo cierto es que si bien hay armas de fuego ligeras que podemos portar
con ambos personajes, también hay que dejar claro que donde más cómodos se
sienten los dos héroes es cuando están lo más cerca posible de sus oponentes.
Así los escenarios fomentan este tipo de encuentros con la arquitectura cerrada
de muchos de los decorados, y proponiendo recursos como tormentas de nieve en las
arenas más grandes para evitar que nuestra vista alcance grandes distancias.
En cuanto al
aspecto de la duración, hablamos de los mismos resultados que las otras dos
historias, y los rasgos son idénticos: abundancia de QuickTime Events, mucha
acción y jefes finales.
GRAFICAS: 10/10 BANDA SONORA:
9/10
HISTORIA: 10/10
JUGABILIDAD: 9/10 IMNOVACIÓN: 9/10
0 comentarios:
Publicar un comentario